Algunas perlitas que dejó la asunción de Castelli

Política 11/12/2011 . Hora: 14:50 . Lecturas: 0
[caption id="attachment_10988" align="aligncenter" width="480" caption="López abraza a González... Pero ¿Y el regalito dónde está?"][/caption]

Regalo fallido Luego de concretada la asunción y poco antes de los discursos de López y Castelli, se anunció que el concejal Ariel González (FVC) le entregaría al intendente saliente un obsequio. González se trasladó al estrado, abrazó a López pero no le entregó nada. El ahora senador, rápido de reflejos, se acercó al locutor Mario Goy y le pidió que dijese que “Castelli ya había comenzado a recortar gastos”. Un momento de humor inesperado, pero que sirvió para aflojar el protocolo de la ceremonia. Ahora, nos quedó una duda acerca de cuál era el regalo. ¿Habrá sido algo que era incómodo para llevar a la ceremonia? ¿Quizás un lechoncito? ¿Un caballo de andar? ¿Chorizos secos? Lo dejamos a la libre imaginación de los lectores.

 

¡Qué calor! La temperatura en el recinto era tan elevada como en un sauna. Algunas damas precavidas sacaron sus abanicos y pudieron combatir el calor reinante. Los caballeros tuvieron que soportarlo estoicamente, limitándose, de cuando en cuando, a dejar escapar algún comentario del tipo: “¡Ta' bravo eh!” Según pudo averiguar este diario, el aire acondicionado del Espacio Cultural se encendió a las 17 horas, pero con la cantidad de público que se concentraría luego, el aire fresco no tendría chance de llevar alivio a los presentes. Castelli y López: dos valientes que se las aguantaron todo el tiempo con el traje puesto. Un dato: los concejales no tenían botellitas de agua en sus bancas. “Un poquito de agua no estaría mal”, dijeron algunos entre risas. Esta moción fue compartida unánimemente por ambas bancadas.

¿Dónde está Facundo? Esa era la pregunta que se hacían muchos. La ceremonia de jura a los concejales transcurrió completa durante al menos una hora, sumando entrega de presentes y certificados a entrantes y salientes. Y Facundo no aparecía. Mirábamos entre el público. No estaba. En la puerta tampoco. ¿Será por el calor que se resiste a entrar?, cuestionaba una abuela que estaba en la tercera fila de la izquierda. ¿Se habrá olvidado?, ¿Se estará arreglando? ¿Tan coqueto será?, interrogaba otra. Al final, cuando estuvo todo dispuesto para la Sesión Especial, Facundo entró por el pasillo central ovacionado por el público. Un toque bien al estilo Hollywood.

Biblia Concejales e intendente juraron con la Biblia cerrada. A nivel nacional, Cristina y su gabinete lo hicieron con la Biblia abierta. ¿Estará bien de las dos maneras?

Discursos parejos La alocución de López se extendió durante 11 minutos y la de Castelli casi 10 minutos. Los dos fueron ovacionados.

 

¡Qué alivio! Ocurrió una vez finalizada la Sesión Preparatoria en la cual, por ser la concejal electa de mayor edad por la lista ganadora, Ermelinda Acuña ofició de manera provisoria como Presidente del HCD. Al dejar su lugar a la flamante titular electa, Marta Busso, Acuña se encaminó hacia su banca con un inconfundible gesto de alivio en su rostro.

Se fue pero volvió Fue al momento de la entrega de presentes a los concejales que terminaban su período 2007 – 2011. Al ser convocada por el locutor, la edil Verónica Grassl del PJ no se encontraba en el recinto. A los pocos minutos, retornó y fue invitada a recibir el obsequio. Inmediatamente, ella se excusó diciendo que se ausentó porque recibió un llamado.

Ausencias Cuando en la ceremonia se aprestaban a entregar los certificados habilitantes a los concejales suplentes electos por el PJ, no estuvieron los nombres de José María Lang (Puan) y de Marcela Martín (Darregueira).

¿Contra la envidia? ¿El nuevo intendente será amante de las cábalas? En la ceremonia lució una impecable corbata de un rojo bien intenso.

Luchando contra los calambres Los reporteros gráficos y camarógrafos que cubrieron el evento no la tuvieron fácil. Tenían dos desafíos: lograr buenas tomas y no estorbar la visión del público y concejales. Entonces, hincados bajo las bancas, no sin el acoso de antipáticos calambres, lograron retratar cada momento.

Comentar esta nota