48 años de presencia en el Distrito

Cultura 09/12/2021 . Hora: 11:16 . Lecturas: 6

Hace 48 años nacía en Puan, el Museo Histórico Folclórico Sureño Ignacio Balvidares logro de un grupo de  puanenses entusiastas quienes, en el año 1969 conformaron la primera comisión presidida por el señor  Jorge Cirio y quienes comenzaron a gestionar la posibilidad de contar con un museo en la cabecera del distrito, contando con el apoyo del entonces intendente municipal Delfor Planterose

Participaron de esta comisión: Estefanía Urcelay de Juri, Andres Jacquier, María Elena Azemar, Alfredo Vercellino, Juan Marcaida, Carlos Alvarez, Raúl H. Rueda, Pedro Eguillor y Francisco Yannarella.

Esta primera comisión efectuó varias reuniones con don Ignacio Balvidares,  quien había manifestado en vida su intención de donar su colección privada para la conformación de un museo en su Puan natal.

Si bien Don Ignacio no pudo cumplir con su sueño en vida, su esposa e hija, hicieron realidad su voluntad. Transcurría el año 1973 y habiéndose renovado la comisión, ésta queda presidida por el señor Carlos Adolfo Castello Luro.

El traslado del material fue posible gracias al aporte de vehículos de la Municipalidad y de la Cooperativa Agrícola Ganadera Limitada de Puan. El mismo se efectuó en el mes de agosto de 1973.

Esta segunda comisión estuvo integrada además por los siguientes vecinos: Euclides Sánchez de Partarrie, Andres Jacquier, Jorge V. Cirio, Estefanía Urcelay de Juri, Guillermo Denegri (h), Norberto Giraudo y Francisco Yannarella.

El Museo abrió sus puertas el 8 de diciembre de 1973 en dependencias del Palacio Municipal, siendo intendente el señor Rodolfo Velazquez. La dirección de la institución es confiada al señor Carlos Castello Luro.

Durante el proceso militar, el acervo del Museo fue encajonado y fue entonces,  cuando otro defensor del patrimonio, el contador Néstor Baglioni,  gestiona su reapertura en un espacio gentilmente cedido por la Sociedad Española. En este lugar el Museo siguió creciendo y proyectándose de la mano de Néstor y de su familia quienes aportaron su pasión por la arqueología y así es que en 1989 se lleva adelante la primera excavación dirigida por el Licenciado Fernando Oliva en la isla de Puan, hallándose el esqueleto humano de 3.300 años de antigüedad.

En 1990 el Museo es trasladado al  ex mercado y, el 17 de noviembre de 1991 se habilita su sala al público.

El hallazgo de un caparazón de gliptodonte en la laguna Chasicó, fue lo que impulsó la creación de la sala de paleontología.

Poco a poco el MIB fue convirtiéndose en un referente distrital y regional muy valorado. Su dinamismo y espíritu participativo se ve reflejado en el trabajo que desarrolla la Asociación Amigos, la cual  ha concretado varios proyectos, como los  paseos a cielo abierto, que han permitido recuperar espacios muy significativos para la memoria lugareña.

Asimismo es de destacar la preservación de valiosa documentación a través del archivo y hemeroteca y su apertura comunitaria con una variada oferta de actividades para todas las edades.

Próximos a las Bodas de Oro

Desde su inicio, el Museo Municipal Ignacio Balvidares presentó una mirada militar sobre la frontera del siglo XIX constituida en Puan, a la vez que no generó espacios suficientes para que las identidades culturales de esa frontera tuvieran voz y presencia en el museo.

 El próximo cincuentenario ( 1973-2023) de la institución se presenta como una fecha propicia para reflexionar sobre su puesta museográfica y proyectar, con un carácter inclusivo e integrador, la renovación de la misma, teniendo en cuenta el concepto de relaciones interculturales que aborda la renovación historiográfica producida en los últimos años.

Se trata de la primera vez que el Museo Municipal inicia un trabajo multidisciplinario para rescribir su guión y rediseñar su puesta museográfica…

Porque lo único permanente es el cambio…afrontamos el desafío de reinventarnos para seguir siendo un referente cultural en el Distrito y la zona.

(Texto de Museo Ignacio Balvidares)