Tras 24 años de labor solidaria, Taty Dudka deja PUADI
La referente de PUADI (Puan Ayuda al Diabético) se radicará en la ciudad de Gualeguaychú, para estar cerca de sus hijos y disfrutar de la familia.
“Alquilé mi casa y el taller que era de mi marido. Tengo a mi hija menor viviendo en esa ciudad y a mis otros dos hijos les queda mucho más cerca. Acá estamos muy lejos. En tres horas estás en Buenos Aires. Hay colectivos, uno puede contar con otros medios de comunicación,” señala Taty.
Ahora, PUADI estará en manos de su nueva coordinadora, Alejandra Zabala, y atenderá en el Barrio San Cayetano.
- ¿Quién quedará a cargo de PUADI?
La referente será Alejandra Zabala y atenderá en el Barrio San Cayetano los jueves por la mañana. Ella trabaja allá y todos los artículos de salud que tiene PUADI quedarán para ella y continuará el mismo ritmo de trabajo. Contamos con una pedicura, Teresa Elsenpaj, quien continuará desarrollando su labor como siempre. La Comisión Directiva seguirá siendo la misma con la diferencia que ahora la secretaria será Silvia Iturrioz, quien ingresa en mi reemplazo ya que ella ocupaba el cargo de prosecretaria. La tesorera continuará siendo Norma Cazaubón y la presidente María Rosa Distel.
Con la farmaceútica Fernanda Willging, colaboradora de PUADI
-Dada la dedicación que le brindó a PUADI en todos estos años, ¿Piensa continuar esta tarea en Gualeguaychú?
Por mis actividades de numismática y filatelia, tengo grupos de WhatsApp y conocidos. Hoy me llamó de Buenos Aires un muchacho, Miguel, que se le declaró diabetes y por el grupo de numismática, sabe que me dedico a la prevención de esta enfermedad. Entonces, cada vez que puedo ayudar a alguien, le mando material sobre alimentación y charlamos un buen rato como sucedió en este caso. Tener diabetes de buenas a primeras es un impacto emocional, por eso les brindo mi tiempo para calmarlos y hablarles. No tengo planeado hacer un grupo allá, pero cuando uno puede brindar la experiencia lo hace.
-¿Qué balance realiza sobre este periodo en Puan donde trabajó tanto?
Tengo 71 años y medio, ahora mis hijos me proponen que descanse y disfrute de caminar por la Costanera sin estar pendiente de horarios. Esa es la propuesta, vamos a ver después qué pasa. En noviembre, PUADI cumplirá 24 años desde la formación oficial del grupo. Es una tarea muy positiva porque cuando das, recibís. Es un ida y vuelta.
Empecé queriendo ayudar a mi marido y aprendiendo. Así se fue sumando gente. Fui diciendo lo que sabía y los médicos siempre apoyaron esto, tanto en Puan como en Pigüé. Siempre que hemos necesitado profesionales, incluso de Bahía Blanca, como el Dr. Santillán, estuvieron. Se fue creando un compromiso, a tal punto que en Enero de 2004 cuando faltó mi marido, yo estaba aplastadísima. Américo Soto, quien había tenido problemas en la vista, gracias a nosotros y al Dr. Paternoster, se atendió a tiempo. Él estaba tan compenetrado con PUADI que apareció en casa y me dijo: Taty, yo tengo un quiosco y no me cuido, cuándo vamos a empezar. Si yo tengo que venir el jueves a controlarme, yo sé que no debo comer alfajores.
Así arranqué otra vez, por la gente que me apuntaló, por eso mi balance es muy positivo. Estuve entretenida y me sirvió como motivo de vida. Ahora me llega el turno de descansar un poco, de acercarme a mi familia y ver como sigue todo.
-PUADI debe ser uno de los pocos grupos de su tipo que existen en la región…
Cuando comenzamos con nuestra actividad, en el distrito no había ninguno. En aquella época me relacioné con gente de Coronel Suárez. Entonces, vinieron hasta Puan y me alentaron a que lo hiciera. Después, estuve internada en el instituto HUSAI de la La Plata viviendo como diabética para aprender. Yo no tengo diabetes, lo hice para aprender. Todo ese aprendizaje lo volqué en el grupo. Hacíamos actividades para ver cómo tratar a una persona con diabetes y que además atravesara por alguna discapacidad.
-¿Desea agregar algo más?
-Quiero agregar algo importantísimo y agradecer a Silvia Iturrios porque desde el 8 de abril de 2021 hasta la fecha nos prestó el consultorio de Ensemble. Anteriormente, yo atendía en mi casa pero con la pandemia, al no tener una habilitación y un seguro, era muy complicado por el Covid. Ella generosamente nos cedió el lugar y colaboró con PUADI. Este jueves voy a atender en Esemble, será mi último día.
El jueves de la próxima semana, PUADI estará atendiendo en el barrio San Cayetano.
Ciudadana destacada. En el año 2013, cuando PUADI celebró 15 años de vida, Lidia Rosa (Taty) Dudka fue distinguida por el Municipio como Persona Destacada mediante la ordenanza 4727/09. “Por su extensa y tenaz labor en la atención de quienes padecen diabetes y por ser fundadora de PUADI”.