En su rol de candidato, Héctor Gay se presentó en Puan

El periodista, ahora candidato a diputado provincial, brindó una conferencia de prensa junto a referentes locales y provinciales del Frente Unidos por la Libertad y el Trabajo que encabeza Francisco De Narváez. En diálogo con TLVP, se refirió a las problemáticas regionales y habló sobre la relación del Gobierno Nacional con los medios de comunicación. Acerca de su decisión de participar en política, dijo: “Llega un momento que hay que decir por qué no participar, por qué no dar la vuelta al mostrador para intentar solucionar alguno de los problemas que existen”.

-¿Cómo vive este paso del periodismo a la política?

-Sí, y todavía lo estoy asimilando porque la verdad es que es muy nuevo. Todavía lo estoy asimilando, yo empecé en Pigüé cuando tenía 18 años y hace 32 años que estoy en Bahía Blanca. Así que la verdad que fueron muchos años y uno todavía se siente en el rol de periodista, y es muy difícil pasar de uno a otro. La idea es asumir un compromiso en este momento particular, uno entiende que frente a los reclamos que todos tenemos, no basta con tratar de arreglar el mundo o de discutirlo en la mesa del café, en la casa, y ni siquiera a través de un medio de comunicación. Llega un momento que hay que decir por qué no participar, por qué no dar la vuelta al mostrador para intentar solucionar alguno de los problemas que existen. Y de algún modo dignificar la política que es lo que todos reclamamos, diciendo que siempre están los mismos, que no hay recambios ni compromiso. Hay gente que participa en la vida institucional y seguramente pasará aquí, en Puan, en Darregueira, y en cualquier lugar, que tiene capacidad como para aportar cosas y que nunca se acercó la política. El espacio de De Narváez ha sido muy generoso, en mi caso planteándome directamente la posibilidad de participar. Y también lo estamos viendo en los distintos distritos, donde hay mucha gente nueva con ganas de cambiar las cosas. En mi caso es un desafío y un compromiso porque sinceramente estaba muy cómodo con lo que estaba haciendo y era parte de mi vida; pero entiendo que hay que aportar soluciones y lo que reclamamos a veces hay que asumirlo. Hay que participar, hay que comprometerse justamente con los valores que uno desarrolló y pregonó durante más de 30 años de periodismo. Ese compromiso y honestidad para hacer las cosas de una mejor forma.

-¿Cuáles son los temas que más le preocupan y en los que usted cree que debe haber un cambio?

-Uno no escapa un poco a la impronta del ciudadano común que ve las cosas. A todos nos preocupa la inseguridad y la inflación. A todos nos preocupa que nos mientan. La región nuestra tiene particularidades. Yo hablaba con algunos de ustedes y recordaba hace muchos años cuando era joven y venía aquí a los bailes de Tiro Federal o de Puan Football Club. En ese momento, no podíamos pensar en algunas cuestiones que hoy preocupan a los pueblos. Quién podía pensar que la droga podía ser un problema en lugares como estos. Ni que hablar de la inseguridad que no solamente es en las ciudades, sino en el ámbito rural. También los problemas de la salud que tardan años y que no se solucionan. Cuántos años hace que se viene reclamando por la reparación de la Ruta 67 y la verdad es que no solo es entre Pigüé - Puan, también en el tramo Pigüé - Coronel Suárez, donde tenemos que esquivar los baches. Después están las particularidades de una región como la nuestra que, evidentemente, está lejos del poder y eso pesa. Estamos muy lejos de Buenos Aires, de La Plata, y uno de los compromisos es tratar de hacer visible la región. Esta parte de la provincia es muy distinta. Si hablamos del campo, que es una cuestión esencial en estas regiones, tengo la idea que desde los estamentos provinciales y nacionales se toma a la provincia de Buenos Aires como la gran productora, pero no se hace diferencia entre el productor sojero que le va muy bien en Pergamino o el productor que se está fundiendo en Azopardo o Bordenave.

-¿Qué opinión tiene sobre la relación del Gobierno Nacional con los medios de comunicación, y de la contienda que mantiene con el Grupo Clarín?

-Es una cuestión bastante perversa porque se mezcla todo. En principio, cuando la Presidente dice “vamos por todo”, y fundamentalmente por los medios. Estos han sido una obsesión desde Néstor Kirchner en adelante, y sobre todo los grandes medios. No solo ha habido una confrontación, sino una situación de desgaste y de querer apropiarse de los medios de una forma u de otra. Hoy, el 80 por ciento de los medios está de algún modo ligado al gobierno porque son los medios públicos o son los medios alineados históricamente. Y también porque han sido comprados por allegados al gobierno. Hay un montón de casos, el último ha sido el de Cristóbal comprando C5N y Radio 10. Antes lo había sido el Grupo Electroingeniería comprando Radio del Plata y en el interior pasa exactamente lo mismo. Esta es una forma de quedarse la prensa, la otra ha sido el reparto de la pauta publicitaria donde un medio como el grupo Perfil tuvo que ir a la Justicia para que le den publicidad oficial. La pauta del gobierno que debería ser equitativa o directamente relacionada con el poder de llegada de los medios, ha sido absolutamente arbitral y ha servido para comprarlos. O sea que si vos querés pauta, tenés que hablar bien de nosotros. El gobierno dice que hay una gran libertad de prensa, pero hay libertad para expresarse en los pocos medios que hoy continúan luchando de manera independiente. Prohibieron a los supermercados para que no pauten en los diarios La Nación, Perfil y Clarín. De estos casos hay muchísimos, no existe una verdadera libertad si estamos pensando en esos aprietes. Hasta ahora la jugada con el grupo Clarín no le ha salido del todo bien, porque la justicia afortunadamente ha puesto algún freno. La política de medios del Gobierno K expresa con toda crudeza el concepto de hegemonía del poder. Esto no les sorprende a aquellos que conocen la situación en Santa Cruz, donde se logró someter a todos los medios, quedan muy pocos independientes y el resto ha sido sometido. Afortunadamente a nivel nacional les va a costar un poco más.

-¿Ha tenido apoyo mediático en Bahía Blanca al conocerse esta decisión de participar en política? ¿Y cómo la ha recibido su familia?

-Yo siento que en general tengo el respeto, no puedo pensar que todos los medios me van a apoyar y que todos los colegas hablarán bien. Algunos lo hacen mejor, otros peor, pero en general con respeto. Para mucha gente fue algo sorpresivo el que yo ingrese en política. No todos los medios piensan igual en cuanto a la ideología, también en Bahía Blanca, como pasa en otros lugares, hay medios más cerca del gobierno y otros más independientes, pero en general no he tenido problemas. En cuanto a mi familia, me apoya porque fue lo primero que traté de cerrar. Si no contaba con el apoyo familiar, no hubiera dado este paso.

-El haber realizado entrevistas a políticos y a funcionarios, ¿le da una ventaja?

-Sí, es una ventaja incluso por la candidatura regional, y porque creo conocer buena parte de los problemas de la realidad, además de venir de esta zona. Y también quizás el periodista está más cercano de los políticos, desde otro ámbito, fuera de la cofradía política. Es una ventaja saber de las problemáticas de la zona, y que no siempre la tiene el que viene de la política.