Una imprevista helada temprana impactó en gran medida los bajos de la región
En cuanto a la zona centro, a pesar de registrar una menor proporción de cultivos de segunda, la sequía agravó el efecto de las temperaturas bajo cero, siendo los bajos del área serrana las zonas más afectadas. Los partidos de Coronel Pringles, Coronel Suárez y Saavedra fueron los más castigados (Fig. 2).
Por último, la zona sur fue la menos afectada por la helada. Los partidos/departamentos donde se registraron los mayores daños fueron Atreucó por concentrar la mayor superficie implantada de la oleaginosa y Tornquist por las particularidades propias del relieve.
La zona norte muestra una situación similar a la del cultivo de soja, donde los mayores daños se observan sobre lotes de segunda. Los cultivares sembrados en fecha temprana y tardía no sufrirían grandes mermas en el rendimiento debido a su avanzada fenología: estado de madurez y fin de llenado de grano respectivamente.
La zona centro, donde se concentra la mayor superficie de este cultivo, sufrió importantes daños de helada. Sobre lotes de siembra de segunda se observó aborto de flores e importantes pérdidas de área foliar, potenciada por la sequía. En los cultivos de siembra tardía los cuales se encuentran más avanzados en su fenología (llenado de grano), la merma en el rendimiento sería a causa de la pérdida de área foliar.
El maíz sembrado en fecha temprana sería el menos afectado por encontrarse finalizando la etapa de llenado de grano o inicio de madurez (además de haber sido el menos afectado por la sequía del mes de febrero).
En la zona sur, donde hay una alta proporción de lotes sembrados en fecha tardía, se puede observar los daños de la helada, principalmente en los bajos de los lotes (Fig. 3).
La disminución del área foliar impactaría durante el llenado de grano con la consecuente pérdida de rendimiento también agravada por la sequía que afecta a la región.
El área costera donde se encuentra la mayor parte del área sembrada, fue la menos castigada por la helada. La elevada humedad ambiental atenuó el impacto de las bajas temperaturas, minimizando las pérdidas en el rendimiento esperado del cultivo de girasol.
Las bajas temperaturas registradas esta semana, podrían acelerar la etapa final del cultivo, favoreciendo el avance de cosecha.
Si bien esta campaña estival se caracterizó por la presencia de diversas adversidades climáticas: granizo, sequía, anegamiento y ahora una imprevista helada temprana que impactó en gran medida los bajos. Los rendimientos de los cultivos sembrados en fecha temprana no se verían afectados, en contraparte los tardíos y de segunda tendrían una merma en su potencial.
--Informe gentileza Bolsa de Cereales de Bahía Blanca --